lunes, 11 de junio de 2007

Galaxia M-51 Una aventura muy natural













M-51 Una aventura muy natural

En ocasiones, se nos olvida un concepto con facilidad a causa de estar excesivamente urbanizados, cuando subo a Sierra Nevada con la idea de buscar el mejor cielo posible en muchos kilómetros a la redonda para hacer fotografía astronómica, no soy consciente de estar adentrándome en un paraje natural de considerable belleza y riqueza en su fauna. Dado que me gusta instalar mi equipo con luz, subo una o dos horas antes de la puesta solar y de esa forma también evito el estrés, si algo se olvida me daría tiempo de solucionarlo pues el lugar elegido se encuentra a escasos 35 minutos de mi casa en coche.


Tal como hiciera en otras subidas, esta también fue relajada y haciendo paradas por la carretera antigua, en esta ocasión, he disfrutado de la visión siempre impresionante del planeo de una pareja de águilas, con absoluta quietud en sus alas, oteaban con insultante superioridad todo lo que queda por debajo de ellas, no es muy común verlas, pero con nerviosismo y rapidez, me lanzo a por la cámara para inmortalizar ese glorioso momento.





Ya en la explanada del Dornajo, unos animalitos más dóciles daban cuenta de la vegetación típica de estas alturas (2100 m.) el rebaño de ovejas solamente y suficientemente estaba custodiado por un enorme mastín que parecía más desconfiado sobre mi persona que en sus confiados lacayos, el pastor debe de estar orgulloso y tranquilo.


Aún no habían terminado las sorpresas, pues mientras tomaba imágenes de la galaxia M-51, puede ver ¡que no oír! el vuelo fantasmal de un búho ¡supongo…! también de gran envergadura y claro tono blanco en contraste con el cielo intensamente estrellado. En esta ocasión, lamenté no poder fotografiarlo, pues tenía la Olympus E-330 conectada al telescopio.


Y todavía más…, cuando estaba terminando la sesión, se me acercó un zorrito y se instaló a unos tres metros de mí, en esta ocasión si que le hice unas fotitos a pesar de molestarle lógicamente, en un principio creí que se trataba del mastín pastor cuando en la profundidad de la oscuridad solo veía moverse las luces de sus ojos que reflejaba la luz de mi frontal, este confiadísimo compañero, esperaba de mí un gesto que aliviara su tortuosa hambre.
Solo me quedaban galletas de chocolate, pero mi amigo las agradeció y me pagó con sus poses. Esto me hizo reflexionar sobre la conveniencia de alimentar a estos animales, pues si se acostumbran a nosotros, puede ser fatal para su existencia, pues no todo el mundo respeta a las criaturas “salvajes”.
Entre tanto, el mastín que no andaba lejos, no paraba de incordiar al zorrito cortándole la digestión de tan fugas tentempié.


A continuación facilito los datos de la imagen:
Telescopio: Newton 800 m.m. de focal y 200 m.m. de abertura Vixen R-200ss
Montura: GP alemana doble motor
Guiado: Telescopio en paralelo refractor 700 m.m. de focal correcciones manuales
Cámara: Olympus E-330
Exposición: 2 tomas a 400 iso y 3 tomas a 200 iso sumando un total de tiempo de integración de 27,9 minutos
Softwares: DDP en Images Plus, niveles y curvas en Photoshop 7
Fecha: Domingo 10-6-2007
Lugar: Explanada del Dornajo (Sierra Nevada 2100 m.s.n.m.)

2 comentarios:

Alfacruz dijo...

Hola Jesús.
Muy linda tu aventura y excelente la imagen de M51. Te envío mis felicitaciones desde Buenos Aires, Argentina.

Rubén Barros
http://astrosurf.com/alfacruz

Paco Bellido dijo...

Preciosa imagen. Enhorabuena